LOS SANTOS ESTAN PREOCUPADOS POR LA MALA CAMPAÑA |
UNA TRISTE CAMPAÑA
San José soportó la
sexta derrota en el torneo Apertura de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano,
pero esta vez fue contundente el 1-3 que le propinó Bolívar, en un partido
donde se desnudó nuevamente las flaquezas que siempre arrastra en esta
competición. Se creyó que en los quince
días de receso futbolístico de la Liga, el equipo de la V azulada mejoraría su
rendimiento, pero en la cancha mostro que nada cambio y sigue siendo el endeble
de siempre.
La campaña de San José
es triste y en lugar de satisfacer a sus seguidores les provoca preocupación
porque el rendimiento del equipo de futbol no convence. En diez partidos
jugados solamente gano un partido (a Oriente) y empató 3 veces; los seis restantes
encuentros fueron derrotas.
Cuando le falta jugar
el último partido de la primera rueda, el jueves 22 ante Wilstermann en
Cochabamba, seguirá ubicado en el penúltimo lugar o quizá ocupe el último
puesto si Real Potosí le gana a The Strongest en la Villa Imperial.
Empezar la segunda
rueda en el último o penúltimo lugar será muy complicado porque el equipo nunca
estará concentrado en su trabajo porque la afición deportiva presionará y eso
genera nerviosismo en los actores que conforman el once principal. Es seguro
que serán once partidos difíciles para el actual plantel de jugadores que por
lo visto no saben cómo jugar, cual el esquema que deben aplicar para salir del
fondo de las posiciones.
Lo cierto es que el
cuerpo técnico y muchos jugadores que aparecen en los medios de comunicación
hablan cosas irreales y prometen mejorar el rendimiento, pero en la práctica
nada de ello sucede; eso quedó demostrado en este partido.
El aficionado tiene un
límite y en cualquier momento pueden reaccionar. A los aficionados no se los
puede comparar con los vivillos que se arrogaron la representación de los
orureños para provocar todo este problema, es fácil hablar, es fácil exigir el
cambio de jugadores y entrenadores pero otra cosa es el rendimiento en la
cancha.
La campaña que cumple
San José es muy parecida a la que sufrió el año 1999, donde también hubo
intervención de los “hinchas” al club y provocaron el descalabro que lo condujo
al descenso de categoría precisamente por la falencia económica, si no existe
la garantía de un “colchón” económico y buena administración, este siempre será
el desenlace.
Pero, estamos en otro
siglo y la experiencia vivida en 1999 debe servir para evitar otro descenso. En
este momento San José debe jugar una segunda rueda en el Apertura, por ello los
pocos dirigentes que manejan el club de los orureños, tendrán que tomar
acciones heroicas urgentemente para evitar lo peor.
En el partido que
jugaron el domingo San José y Bolívar, quedo demostrado que el cuadro orureño
no está bien estructurado. Muchas fallas en el orden táctico y técnico.
Jugadores que no cumplen sus funciones acertadamente y la desmotivación en
muchos de ellos es el condimento para que no respondan como corresponde.
Si bien los de Bolívar
no cumplieron un excelente partido, pero demostraron mayor eficacia para anotar
los goles y ganas para imponer su juego. Así sucedió en el partido porque desde
el principio desarmo al “santo” con el primer gol a los 6 minutos y luego se encargó
de cuidar la ventaja y aprovecho las fallas infantiles del cuadro orureño para
aumentar la diferencia.
El marcador pudo ser más
amplio en favor del cuadro celeste paceño, como también se pudo achicar la
diferencia, pero el “santo” está lejos de ser ese equipo aguerrido, luchador y
efectivo.
De nada sirve que los
aficionados apoyen desde las tribunas o durante la semana alienten al equipo
por los diferentes medios de comunicación, si en la cancha existen 11 jugadores
que no responden futbolísticamente. No habrá milagros, se debe trabajar
responsablemente. Los dirigentes deben hablar menos y solucionar los problemas sin lamentarse porque
sabían de la situación del club.
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